Mediante la aplicación de la metodología de Análisis de Ciclo de Vida (ACV) se evalúan de manera sistemática los impactos ambientales de un producto, proceso, servicio o evento a lo largo de todas las etapas de su ciclo de vida. El ACV se sustenta en la información levantada en la fase de elaboración de inventario (ICV), lo que permite a nuestros clientes conocer y evaluar el impacto ambiental en cada etapa del ciclo de vida, tales como el calentamiento global, la contaminación del aire y del agua, el agotamiento de recursos, entre otros.
Los ACV pueden ser parciales aplicando un enfoque cualitativo o basado en ciertas etapas del ciclo de vida.
Con esta información se elaboran recomendaciones de gestión ambiental orientadas a reducir el impacto en el medioambiente y, con este, optimizar procesos y reducir costos, tomar decisiones de mejora continua, crear conciencia ambiental a la vez que se cumple voluntariamente con normativas ambientales internacionales, pudiendo además resaltar el compromiso ambiental de la empresa con evidencia científica, lo que mejora su reputación y competitividad.